Muchas personas usan lentes en la actualidad y una de las causas principales es la miopía. Identificar a temprana edad puede evitar que esta avance con el transcurso de los años y es de vital importancia que como padre o madre lleves a tu hijo al oftalmólogo para descartarla.
La miopía es un error refractivo más común del ojo. En un caso de miopía, la luz que normalmente se enfocaría en la retina directamente, en su lugar aterriza en frente de ella, causando una visión a distancia borrosa. Las personas miopes pueden ver fácilmente objetos que están cerca de ellos, pero no los objetos que están muy lejos. ¿Qué causa la miopía? La miopía ocurre cuando el globo ocular es demasiado largo, en relación con el poder de enfoque de la córnea y el lente del ojo. Esto hace que los rayos de luz se enfoquen en un punto delante de la retina, en lugar de hacerlo directamente en su superficie. Actualmente no se sabe por qué algunas personas desarrollan miopía y otras no. Sin embargo, ciertos factores de riesgo aumentan la probabilidad de que una persona sea miope:
Casi siempre relacionamos la visión borrosa de lejos con la miopía, sin embargo, existen otros problemas que podrían causarla. También podría ser ocasionada por los siguientes.
Baja agudeza visual: La agudeza visual es la capacidad de percibir y diferenciar objetos en condiciones de buena iluminación. Aunque en parte depende de las estructuras del ojo, como la córnea, el cristalino o la retina, no sólo los problemas refractivos (miopía, hipermetropía y astigmatismo) influyen en ella. Hay personas que, a pesar de tener corregidos sus problemas de refracción o de no tenerlos, tienen una escasa agudeza visual. Esto ocurre porque la agudeza visual también depende del estado de nervio óptico, y de la parte del cerebro que procesa la información visual. Por tanto, no podemos decir que la agudeza visual mida la visión, ya que este es un proceso mucho más amplio por el que se percibe e integra la información recibida por vía visual y se analiza y procesa en el cerebro.
Astigmatismo: El astigmatismo es un problema refractivo que causa visión borrosa a todas las distancias. Se produce cuando la córnea, la capa más exterior del ojo que permite el paso de la luz desde el exterior al interior del ojo y protege el iris y el cristalino, tiene una forma irregular. La luz se enfoca en varios puntos de la retina, causando visión borrosa tanto de lejos como de cerca. El astigmatismo puede aparecer solo o asociado a miopía o hipermetropía, pero en ambos casos causa visión borrosa a todas las distancias, aunque el problema sea más fácil de detectar al mirar a una cierta distancia.
Cataratas: Las cataratas se producen cuando el cristalino pierde su transparencia, volviéndose opaco progresivamente. El principal síntoma de las cataratas es la visión borrosa, además de la fotofobia, la mala visión nocturna, la dificultad para distinguir colores e, incluso, la visión doble o diplopía.
Diabetes: La diabetes es una enfermedad crónica que se debe a la incapacidad del páncreas de sintetizar suficiente insulina para el correcto funcionamiento del cuerpo. Esto genera alteraciones en la cantidad de glucosa en la sangre y tiene como consecuencia multitud de síntomas que varían de un paciente a otro, incluidos problemas visuales. Concretamente, la diabetes es causante de dos enfermedades relacionadas con la vista: la retinopatía diabética y el edema macular diabético.
Pantallas electrónicas: El uso, o mejor dicho el abuso, de las pantallas de los móviles, ordenadores, consolas de vídeojuegos, lectores de ebooks, etc., es una nueva causa de visión borrosa, tanto de lejos como de cerca. Nuestros ojos sufren mucho con el uso tan frecuente y continuado que hacemos de las mismas.
